Fátima y Crisóstomo, protagonistas de Las sombras en el manglar, nos siguen guiando a través de los rincones isleños y del agua profunda al mismo tiempo que nos introducen en detalles de su ambiente. En La isla nuestra de la Aurora, los seguiremos muy de cerca hasta que lleguen al final de su destino.
«La marea estaba completando su ciclo. Las aguas subieron silenciosamente y con suave susurro de las olas lavaron la orilla del varadero de la comarca.
La espuma esparcida por la brisa manchaba con humedad las canoas, que se movían como hojas secas en la superficie del agua verde claro. Parecía como si la naturaleza dejara a Fátima y a Crisóstomo en seguras manos del futuro».

Al ritmo de versos alejandrinos monorrimos, formando la estructura estrófica de la cuaderna vía, el poeta comienza emulando el mester de clerecía y mostrándonos una poesía cuidadosamente elaborada, contradiciendo sus intentos de hacer creer al lector que su poesía se encuentra al «margen del oficio», y se nos da a conocer como un gran maestro en la retórica de la captatio benevolentia. El poema prólogo en cuaderna vía presenta los temas serios de los que va a tratar el poemario (preferentemente el paso del tiempo, los recuerdos, la nostalgia, el amor, lo efímero, la muerte y la nada), pero con una perspectiva irónica, quitando hierro a lo que, en teoría, es pura creación artística.
El propio título, Bricolage (que utiliza una tipografía galicista), parece insinuarnos que su poesía está realizada por un poeta aficionado y que se manifiesta en un «discurrir callado»; sin embargo, desde los primeros versos del libro no podemos encajar su autoría a un artífice que improvisa. En su poesía hay un perfecto equilibrio entre la tradición literaria y la aportación de originalidad, tal y como concebía Luis Cernuda la creación poética.
Nos sorprenderá la variedad de estrofas clásicas perfectamente elaboradas: la ya mencionada cuaderna vía, el soneto, las estancias, los cuartetos, hasta llegar a composiciones más populares como el romance o romancillo, que también utilizaron los poetas que escribían composiciones cultas, sin renunciar al verso libre e incluso a la ruptura de la estructura de la estrofa propia de la poesía vanguardista.

La novela recorre las calles de Vallecas en los años 70. Por los escenarios de este barrio se entrelazan tres historias agitadas que discurren entre la zozobra y las anomalías sociales que marcaron la vida de las personas de Vallecas y de otros muchos lugares del país.
Miguel es acusado de un crimen y su historia transcurre por las cárceles de Madrid, entre los dramas que se escribían en estos establecimientos. Pedro, su padre, se propone ayudarle y supedita la vida propia a la salvación del hijo.
Eugenia vive los últimos años en una residencia de la tercera edad y desde allí observa el paso de los días en la capital. Su vida navega entre las anormalidades que ocurren en estos lugares de tránsito hacia el otro mundo y las anormalidades que acontecen en el asilo. Su hija, Manuela, trabaja limpiando las oficinas de una empresa de telefonía y su vida bascula entre la historia de amor con Inés y los sinsabores de un hijo que la desprecia.
La novela narra las efímeras alegrías de sus protagonistas y los sufrimientos que soportan para salir a flote cada día. Se trata de una novela costumbrista que se interna en los años de la Transición y bucea en las vidas azarosas de las gentes que vivían en Vallecas sobreviviendo a las embestidas de cada jornada.

Nunca antes una época había expresado tal afán de dominio como la nuestra.
La actualidad como problema filosófico: sentido y vocación es un conjunto de pequeños escritos que analizan las distintas configuraciones teóricoprácticas propias de nuestra época y desde las que el ser humano entiende la realidad y a sí mismo (cultura, ciencia, política, lenguaje, historia). El punto de partida es la caracterización de la modernidad como un proceso de dominio lógico-técnico del ente a partir de una comprensión del ser no puesta en cuestión. El efecto de época resulta de la clausura de la cuestión del ser de acuerdo al proceso de dominio e impide al hombre apropiarse de su sentido ontológico y lo orienta hacia la reproducción de las formas culturales e ideológicas vigentes en el espacio público donde cada hombre auténtico acaba diluyéndose. Esta voluntad de dominio ha alcanzado cotas sin precedentes gracias a la irrupción de las modalidades de simulación, que convierten el pensamiento en un simulacro y un artificio más.
La única posibilidad de un pensar auténtico y honrado es volver a atreverse a pensar la cuestión del ser tal y como acontece en el inicio: la antigüedad griega y la experiencia cristiana. Pero ello implica un desgarro, la ruptura del efecto de época, para reconocer que en lo fundamental seguimos siendo un misterio abierto a la llamada de la divinidad desde la que apropiarnos del sentido de nuestro ser.

Las profundas implicaciones y las extensas ramificaciones en las principales áreas matemáticas de esta humilde y sencilla teoría de los Números dimensionales suponen una visión renovadora de la matemática contemporánea y una refundación de los pilares algebraicos de la ciencia actual. El presente texto recoge la formulación matemática de estas nuevas teorías que bien pudieran estar casi a la altura de Los elementos de Euclides de Alejandría, de Las coordenadas cartesianas de René Descartes o de The Matemathical Analisis of Logic de George Boole. Este conocimiento finaliza la teoría actual de los polinomios basada en monomios de potencias sucesivas por los nuevos y avanzados polinomios dimensionales basados en funciones factoriales de dimensiones sucesivas, constituyendo además una clarificación y amplificación del álgebra lineal en su comprensión del espacio.
Debido a la geometrización —su isomorfismo con los elementos básicos geométricos— de estos polinomios dimensionales, supone también toda una revolución en la pedagogía de la matemática a niveles incluso infantiles. Esto es precisamente lo más importante de estos nuevos conceptos: que nuestros niños y jóvenes puedan beneficiarse de estos avances en el modo de aplicar la matemática y entender para qué sirve, pues reconstruye el antiguo, ruinoso y caído puente helénico entre el álgebra y la geometría.

Los niños vergonzosos, tímidos o altamente sensibles a menudo tienen miedo a hablar. El miedo a hablar aparece también en el mutismo selectivo y en los trastornos del espectro autista.
Como ves, es un miedo mucho más común de lo que puedas imaginar, y provoca mucho sufrimiento en el niño, afectando a su vida social, al aprendizaje y a su autoestima. En este cuento la pequeña Lisa afronta su fobia a hablar a través del apoyo de su terapeuta, y consigue, a través de varias estrategias, vencer ese miedo y darse cuenta de que los miedos, cuanto más los alimentamos, más grandes se hacen. Y cuanto menos caso les hacemos, más pequeñitos.
Los cuentos son una maravillosa herramienta terapéutica para trabajar las emociones con los niños y puedan sentirse identificados, entender lo que les sucede y normalizarlo.

Víctima de abusos sexuales durante varios años en su época de monaguillo, estos hechos le causaron traumas profundos a lo largo de su vida, imposibilitándole mantener una relación sexual normal de pareja y destruyendo su existencia hasta límites impredecibles.