¿Alguna vez te has sentido perdido, sin esperanza?
Si es así, este es tu libro. Aquí encontrarás un ejemplo de superación personal.
El autor expresa en esta obra sus sensaciones y sentimientos en su larga lucha
contra una enfermedad que se le presentó de golpe y que estuvo a punto de
costarle la vida. En estas páginas discurren poemas llenos de sugerencias, y
a veces de ambigüedades, en los que el autor intenta exteriorizar recuerdos
más o menos conscientes de todo el largo camino, pleno de altibajos, que
recorrió por varios centros sanitarios. El poemario concluye con un canto a
la esperanza e invita al lector a no desfallecer en momentos de desesperación.
Basta ya: desenmascarando la violencia de género
¿Cuántas historias ocultas perduran entre susurros del silencio? Descubre la
verdad detrás de la violencia de género.
En las sombras de la intimidad y el dolor, se esconde una realidad urgente: la
violencia de género.
Este libro arroja luz sobre las historias silenciosas, revelando los ciclos destructivos
que atrapan a víctimas y perpetradores. Desde el análisis crudo hasta la
llamada a la acción, entre silencios desafía al lector a confrontar el problema
y a ser parte del cambio.
Antonio pronto comenzará el colegio, pero es tan
curioso que no se aguanta las ganas de preguntarle
a su madre qué aprenderá primero. En su agonía,
vive experiencias que despiertan cualidades y sentimientos cotidianos como el miedo, la curiosidad,
la alegría y el amor. Así, el colegio se vuelve el lugar
donde pasa los días más divertidos
Personajes y personajillos de Alicante.
En este libro le cuento algunos datos de personajes y personajillos relacionados con Alicante. Ya verá. Unos lo son por nacimiento, otros son alicantinos de adopción que vinieron a Alicante por una u otra razón y aquí se quedaron,
y están aquellos que estuvieron de paso por la capital alicantina y se marcharon llevándose un buen recuerdo.
Elcano, Lorca, el Negre Loma, el Caruso alicantino, el sargento Moquillo,
doña Violante, Emilio Varela, Jorge Juan, Jaime I, las cigarreras, Gabriel
Miró, Miguel Hernández, Carratalá, Machín, Cela, Esplá, Miralles, Negrín,
Dabrowsky… Todos forman parte de la sociedad alicantina de una manera
o de otra. Unos son parte de la leyenda urbana que se va gestando oralmente
en la calle y que va pasando de generación en generación. Otros forman parte
de la historia de la ciudad por sus acciones, por lo que dejaron escrito, por lo
que dijeron de ellos o manifestaron de sí mismos.
¿Qué entiendo por personajes o personajillos? ¿Quiénes son importantes?,
¿quiénes no lo son o lo son menos? Como cada uno de nosotros tenemos
nuestra propia percepción de las cosas, le dejo a su elección esa condición.
Después de leer este libro, clasifique usted mismo qué es cada uno y cuál es
más importante, sea quien sea el personaje o el personajillo.
Al llegar a la vejez, a través de sus fotografías, la protagonista, hija de un republicano, decide narrar la historia de su vida desde su experiencia en un internado del Auxilio Social. Asimismo, cuenta también las vicisitudes con las que
se encontró y los altibajos que mantuvo con su padre, uno de los personajes
Una noche en la que el Sol y la Luna pudieron estar juntos más tiempo del que
solían estarlo, no dejaron de amarse hasta el amanecer. Por esta unión y por el
gran amor que estos dos se mantenían, tuvieron una hija. Esta era tan bella y
hermosa que sus padres le pusieron el nombre de Flor del Valle, ya que era tan
bonita como la flor de aquel radiante y generoso territorio.
Tanto sus padres como los habitantes mágicos del valle no dejaron de protegerla.
No importaba que fueran hadas, elfos, duendes gruñones y toda clase
de animales mágicos, grandes y pequeños. También la cuidaban los grandes
árboles del bosque y de las altas montañas que rodeaban el hermoso valle,
donde la reina no era otra que la Luna.
Gawain es un poderoso y guapo elfo que se encarga de cuidar de Flor del Valle
y enseñarle todas las cosas que tiene que aprender. Pero, aunque Flor del Valle
es inmensamente feliz con aquella vida, siente curiosidad por saber qué es lo
que hay fuera del Valle de la Luna y les pide a sus padres que la dejen salir.
A pesar de que ellos intentan que no lo haga, Flor no deja de insistir y de pedirlo
una y otra vez hasta que al fin lo consigue y, sola, emprende el camino.
Una vez fuera, Flor del Valle se da cuenta de que no es lo que ella espera ver
en el exterior de su querido hogar, ya que solo ve tristeza, hambre, miseria y
mucho dolor.
Noticias desde Bremen Un aventurero al servicio del arzobispo Dietrich von Mörs
La primavera de 1418 llega acompañada de los últimos ecos del concilio de
Constanza, en el que se han tomado una serie de graves y solemnes decisiones
en pos de atajar el quebrantado estado espiritual y la desunión del momento.
Dietrich von Mörs ve en la nueva doctrina del conciliarismo una oportunidad
dorada para aumentar su poder e influencia, formando un fuerte partido de
arzobispos y cardenales que pueda dominar tanto en Roma como en las tierras
alemanas. Para ello encarga a su hombre de confianza, Hans Dörflinger, que
escolte, junto con su animoso e inseparable castellano Pedro de Peñafiel, a un
emisario eclesiástico hasta Bremen, donde espera empezar a urdir su nueva red
de influencias. Tras un largo y peligroso viaje, Hans descubre al llegar una oscura
trama para asesinar al obispo de esa ciudad, así que se dispone a desenmascarar
a los culpables. Pero los confabulados contraatacan, deseando eliminar a Hans
y sus amigos, cuya intempestiva y molesta llegada desbarató el siniestro plan.
Así, aparecerán en escena los crueles y dañinos Vitalienbrüder, los piratas del
mar del norte, y Hans también tendrá que vérselas con los indómitos Dithmarschen,
los hombres de los pantanos, que mantienen su independencia, derechos
y libertades en un mundo donde pocos rincones quedan sin un señor.
Informado del asunto, Dietrich von Mörs ordenará a Hans que resuelva el caso
y restablezca la situación, pero no le enviará ninguna ayuda. Una vez más, Dörfinger
se verá rodeado de toda clase de peligros y dificultades para satisfacer
los deseos de su patrón, encontrando el único apoyo en su propia valentía y su
fuerza de voluntad, mientras que con el pensamiento busca una y otra vez a la
chica del sur a la que ama, Inge Meissner, a la que se ve obligado a desatender
constantemente por su aciago sino, la venganza y un nefasto juramento.
Tratado Espiritual de las templarios de Jaime I
Siempre siendo sincero conmigo mismo, antes de ser elevado a caballero
templario, me tomé un periodo de tiempo para reflexionar, incluso filosóficamente,
si espiritualmente estaba preparado para asumir en limpia
conciencia mi espíritu católico, cristiano, apostólico y romano, coger el
rosario con una mano y la espada con la otra en defensa de la fe.
Ciento ochenta y tres días de proezas casi épicas de mi raciocinio, por un
lado, y de mis valores por el cristianismo, por el otro, fueron sin duda
una batalla interior que libré sin descanso. Así, en esa exigencia personal,
siempre serena e imparcial ante mis dos postulaciones, he de confesar que
la tibieza no pudo impedirme que en las noches de insomnio solicitase la
especial gracia de la Divina Providencia y del Espíritu Santo para que me
auxiliasen en tan determinante decisión de incorporarme al temple.
Y por n llegó la respuesta, encendiendo mi corazón e iluminando mi
confusa mente. Una muda voz, llena de ternura pero a la vez grave como
la de un general, disipó mis dudas: «Elévate a templario y escribe un tratado
espiritual». En consecuencia, considerando como cristiano que los
caminos del Señor son inescrutables, fui elevado a caballero mediante
juramento de la defensa de la fe, la Iglesia católica y la protección de los
peregrinos en la basílica de San Isidoro de León: Non nobis domine sed tuo da
gloriam («Nada para nosotros, Señor, sino para la gloria de tu nombre»), y,
arrodillado ante el sacrantísimo, de mis labios brotaron las palabras Deus
vult («Dios lo quiere»).
Hermano, postulante, novicio y querido lector, cumplidas las dos vertientes
de aquella voz interior, en vuestras manos tenéis algunos de los principales
parámetros espirituales que, salvo criterios más teológicos, considero
esenciales para ser un templario y, por ende, un monje y soldado de Dios.
De Barcelona a Londres. De Londres a Holanda. De Holanda
a África, y al sur de España. He aquí la vivencia existencial de
Juncal, el cual en la década de los cincuenta (siglo XX) se ve
obligado a emigrar a Inglaterra. Allí recala en un almacén de
vinos regentado por un aragonés, de cuya contabilidad se hace
cargo prontamente. Se le conoce como Juncal por su aspecto
estirado y torero.
Pronto se hace novio de una joven escocesa, con la cual recorre
Londres de arriba abajo, pero la profesora de inglés de Juncal
le seduce y el noviazgo se rompe.
Pasan los años: la decadencia del Imperio británico, los nuevos
tiempos de cambio social con la irrupción de los Beatles, la
minifalda, la inmigración de caribeños y africanos.
El dueño del almacén de vinos se casa con una holandesa, cuyo
negocio familiar exporta jerez español. En busca de nuevo
mercado para el jerez, Juncal viaja a Edimburgo y se topa con
su antiguo amor, ahora casada con el cliente escocés. Al cabo
de cierto tiempo Juncal se hace novio de la sobrina holandesa
de la esposa de su jefe; casado, efectúa un viaje de novios a
Kenia: safaris y playas.
Con el paso del tiempo, Juncal y familia se recorren la Costa
del Sol. Íntimo de Jaimie MacDougal —el cliente escocés—,
terminan ambos sus días en el sur de España (Sotogrande y
área circundante, Guadiaro)
Después de varios libros de relatos, con los que ha ensayado
distintos lenguajes narrativos, José María Ramírez
Mellado publica su primera novela. Su protagonista, Alberto
Medina, diplomático español afincado en Estados
Unidos, en los años de la II Guerra Mundial y posteriores,
se ve implicado en una serie de acontecimientos misteriosos
que lo empujan a la búsqueda de un libro que pretendidamente
contiene todo el conocimiento del universo.
Sin creer en ello, la singularidad de los acontecimientos
estimula su curiosidad hasta límites casi enfermizos,
desembocando en lo que él mismo denominará una especie
de novela negra.
La acción nace en el Madrid de 1936; después, pasa por
la España de posguerra y sigue en los Estados Unidos, que
se están convirtiendo en el imperio mayor del mundo.
Pasa por el servicio de inteligencia británico y los inicios
de la informática para recalar de vuelta en Providence, la
segunda ciudad más grande de Nueva Inglaterra.
En Providence, patria chica del escritor de ciencia ficción
Lovecraft, cuyos relatos van a tener un insólito protagonismo,
se va a producir el aparente desenlace de la narración,
al que se llega sin dejar de incrementar progresivamente
su intensidad, llegando a alcanzar un ritmo casi
frenético que nos llevará al inesperado desenlace
Paquito está convencido de lo que quiere
ser cuando sea mayor: quiere ser minero.
Como su padre y su abuelo. Es muy peli-
groso, pero a él le gusta. Y no se siente un
héroe por ser valiente aunque ello suponga
trabajar a muchos metros bajo tierra y en la
oscuridad, iluminando lo que hace solo con
la luz que llevará en el casco. El padre de
Francisco, junto con otros 32 mineros, Lleva
muchos días atrapado en la mina, pero él
no tiene miedo, quiere conseguir lo que se
ha propuesto. Tampoco piensa que su padre
y los demás mineros sean unos héroes
por estar resistiendo la situación en la que
se encuentran.
Hay que admirar a esas personas que tienen
claras sus ideas y las llevan a cabo cueste
lo que cueste aunque haya inconvenientes y
tropiezos.
LOS HOMBRES SOBRE LOS QUE NO QUISE ESCRIBIR: un relato violento con ciertos rasgos de comicidad (I parte)
Bruno y Eusebio son dos jóvenes hermanastros que en las Navidades de 1915 se ven involucrados en un truculento crimen en La Coruña, un turbio asunto del que, gracias a un inteligente amaño, lograrán finalmente salir libres de polvo y paja. Poco tiempo después, sus vidas se separan siguiendo caminos diferentes, perseguidas, sin saberlo, por el mal fario.
Con el paso de los años y disfrutando ambos de una excelente posición económica lograda fuera de los cauces legales, volverían a encontrarse de forma no casual en Madrid a mediados de marzo de 1933, y, aunque ese día mantuvieron una reunión cordial como hermanos largamente separados, a Bruno en particular le resultó decepcionante.
Luego, transcurrirían tres años no exentos de acción por ambas partes, hasta que el súbito estallido de la Guerra Civil les sorprendió de nuevo en Madrid. Allí, después de dejar sus asuntos atados y bien atados, huirían a Francia dispuestos a vivir una dorada jubilación.
Sin embargo, es Dios el que dispone, no el hombre. Así, cuando parecían haber alcanzado su propósito, a uno antes que al otro, y con desigual inquina, acabaría por alcanzarles el mal fario.
Aunque limpies de tus zapatos el polvo de mi camino
y dirijas tus pasos hacia otras veredas,
jamás podrás olvidar la brisa que, al recorrerlo,
jugaba con tu pelo.
Aunque quites de tus cabellos las flores de mis campos
y te regocijes con el verdor de otras praderas,
jamás podrás olvidar el perfume que, cerrando los ojos,
envolvía tu cuerpo.
Aunque me dejes, amor,
porque tu búsqueda nunca ha de acabar,
porque la vida es siempre descubrir lo nuevo,
jamás podré olvidar que tú, hoy,
estuviste a mi lado
Un trabajador bursátil con buen estatus social, por circunstancias de
la vida, cae en la máxima pobreza. Debido a un breve encuentro casual
con un pequeño hombre venido del Tíbet, le ayuda y le transforma con
el poder de acelerar el karma de todos los estados de la materia y toda
forma biológica
Desde el palacio de las ninfas
Se pueden olvidar todas las palabras menos una. Y esa palabra es amor.
Estamos en el año 2025. En Múnich. Minerva es hija natural de un solvente
dirigente español. Trabaja como química en un prestigioso laboratorio
germano.
En la ciudad bávara encuentra a Luis, que es licenciado en filología española
y le da clases de alemán. El profesor, por motivos familiares, marcha a
Sudamérica. Minerva, en su recorrido por la urbe, llega al Palacio de las
Ninfas. Visita el salón de las bellezas, quedando deslumbrada por la beldad
que emana el retrato de Lola Montes.
Desde los salones del palacio, Minerva, que está enamorada de Luis, le
lanza cíclicamente una colección de epístolas en las que hace una loa de sus
padres, su entrega y sacrificio. Glorifica al máximo su grandeza. Recuerda su
primera comunión, su afición a la música, a los cómics y sobre todo al cine,
espectáculo que pontifica. Pero ante todo Minerva canta al amor.
La nave de la eternidad y el dios olvidado
El profeta Enoc, padre de Matusalén y abuelo de Noé, fue el primer humano
abducido que viajó con los luminosos en una nave estelar.
Los luminosos, seres inmortales, habían ido, durante millones de años, manipulando
el ADN de una raza de homínidos, dándoles inteligencia y alma.
Conoció a los doscientos custodios que habían engendrado hijos, con mujeres
humanas, llamados nefilin. Y castigados por tal abominación fueron
condenados a la oscuridad eterna y los nefilin destruidos con el diluvio. Enoc
fue el único humano que trascendió viajando con un arcángel sin morir a la
presencia del Gran Espíritu.
Astreo, hijo de Sileno, padre de todos los sátiros y mano derecha del dios
Dioniso.
Astreo, dios menor, tiene el poder de transformarse en humano y lo hace
como Ptolomeo, el primer general de Alejandro y mejor amigo.
Todos los dioses griegos han sido expulsados del planeta Tierra por los luminosos.
Solo Astreo permanece escondido como un dios olvidado. Por su
gran admiración hacia Alejandro, ha decidido que muera en el cénit de su
grandeza y que sea recordado por los humanos como un dios.